La infancia es tiempo de juego, de abrazos y de sonrisas sinceras, nunca de miedo ni dolor.

Ningún niño merece maltrato, y protegerlos es una responsabilidad que nos une como sociedad.

Cada niño tiene derecho a crecer en un entorno seguro, lleno de amor, cuidado y respeto. Su risa no es un privilegio: es un derecho que debemos defender todos los días.

Cuidar la niñez es sembrar un futuro más justo, humano y esperanzador.

Porque cuando protegemos a nuestros niños, protegemos la vida.

Leave a reply